Las Cuevas era una antigua casa de labradores, rehabilitada por sus dueños y convertida en cuatro casas rurales. Antes, el inmueble albergaba en la planta baja una almazara, para la elaboración del aceite. Las casas se encuentran situadas en el corazón de Chulilla, a pocos metros de la Plaza del Ayuntamiento y con unas vistas espectaculares al Cañón del Turia. En ellas encontramos un mobiliario de maderas nobles y materiales de primera calidad. Entre las cuatro viviendas, llamadas Cueva del Sereno, de la Portería, del Gollisno y Cueva del Tesoro, encontramos una amplia variedad de medidas y capacidades.